Esto se debe al esfuerzo realizado en el parto y al estrés que exactamente el mismo puede generarle a la perra. Hay perras con un accionar maternal más marcado, que son aquellas que proceden a la limpieza de sus cachorritos y a alimentarlos de manera inmediata. Ciertas llegan a ser tan protectoras de su camada que pueden aun atacar a quien se acerque demasiado a la misma. En los problemas que podemos encontrarnos, los hay que se localizan en la matriz de la perra y otros problemas tienen otros orígenes. No todos y cada uno de los problemas terminan con el parto sino ciertos surgen tras el mismo y por este motivo hay que estar informado.
Inmediatamente después del parto hay que lavar la vulva con agua no muy caliente y secarla realmente bien; luego debemos adecentar bien el cajón del parto, sacar cualquier resto de placenta que haya quedado y mudar los diarios por otros limpios o por una sábana. Mantener una buena higiene del lugar donde están la madre y los perros chiquitos es esencial para impedir infecciones, se recomienda limpiarlo todos los días, con artículos que no resulten tóxicos para ellos (no usar lejía ni amoniaco, por servirnos de un ejemplo). Debería ser en un espacio tranquilo, confortable y sin corrientes de aire, donde no se vean molestados por el ruido o la luz desmesurados, y que no sea en un espacio de paso de la casa. La mayor parte de las perras son tolerantes con la existencia de su dueño cerca de los perros chiquitos, pero tienen la posibilidad de ponerse muy nerviosas y protectoras si toda la familia o amigos están cerca, y desean visitar o coger en brazos a sus pequeños. En estos casos tienes que asistir cuanto antes a tu veterinario/a de confianza para que explore a la perra y logre descartar que haya algún cachorro que no haya nacido. Es muy importante que tu veterinario/a explore a tu perra lo antes posible, verifique que todos los perros chiquitos han nacido y no queda ningún mucho más, y verifique su estado de salud en general.
¿De Qué Manera Es El Parto De Una Perra Primeriza? Claves Y Consejos
En este caso es necesario que tu veterinario/a explore a la perra para apreciar su estado general después del parto. Recomendamos que la revise tu veterinario cuanto antes, para ponerle tratamiento y que optimize cuanto antes, para continuar atendiendo a los perros chiquitos. La mayoría de las veces todo se desarrolla sin problemas y la experiencia de tener cachorros es muy grata. Piensa con tiempo qué vas a hacer con los pequeños una vez que hayan sido destetados, en tanto que este momento llega en solo dos meses y no debe tomarte desprevenido. Lo usual es cambiar a un pienso de calidad para perros chiquitos y darle un tanto mucho más de la cantidad que come habitualmente.
Conforme los perros chiquitos comiencen a consumirla, la producción de leche por la parte de la hembra decaerá. El régimen consiste en darle antibióticos, aplicar compresas calientes y extraer el líquido infectado. Si la leche es normal, los perros chiquitos tienen la posibilidad de continuar mamando en relación la perra esté menos dolorida.
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Durante las horas precedentes al parto acostumbran a perder el apetito y “hurgar” su cama con cierta frecuencia. Para saber cuándo ocurre esto, toma la temperatura a tu perra dos veces al día con un termómetro rectal durante la última semana de su gestación. Si observas que tomarle la temperatura molesta a tu perra, deja de llevarlo a cabo. Tendrás que ayudarla a permanecer lo mucho más tranquila viable en este momento. Hasta que comience a respirar(en ocasiones tardan hasta 1-2 minutos).A continuación limpiaremos todos los restos y procederemos a ligar y recortar el cordón umbilical. Cuando la perra concluye el parto es posible que la hallemos cansadísima o muy agitada .
Las demandas alimenticias de los pequeños son constantes, puesto que, recién nacidos pueden llegar a mamar cada tres o cuatro horas día y noche. Este desafío metabólico de la madre es en especial esencial en el caso de camadas varias. Hablamos de una disminución esencial de los escenarios de calcio en sangre. Si te encuentras pensando “mi perra respira muy rápido después del parto”, la primera cosa que debes meditar es que termina de dar a luz y, seguramente, a múltiples cachorros, lo que supone un agotamiento físico enorme. Por este motivo, es normal que intente volver como estaba y recibir suficiente oxígeno a la vez que disminuir un tanto su temperatura corporal, ten en cuenta que los perros no sudan en todo el cuerpo y el jadeo les contribuye a regular la temperatura. También es posible que todavía sienta fuertes dolores, pues el cuerpo debe volver como estaba recolocando el útero y demás órganos en su ubicación.
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A lo largo de estas últimas contracciones uterinas es muy normal que si una perra jadea bastante después del parto, tras salir el último cachorro. Tienes que prestar atención y ver que concluya de salir un líquido oscuro, que puede tener algo de tejido de la placenta por lo que puede ser algo denso. Una vez esta fase concluya tu perra irá respirando mejor de a poco y haciéndose cargo de que sus pequeños mamen todos y bien. Desde unCOMO deseamos guiarte dándote toda la información viable que da respuesta a tu duda sobre “¿por qué mi perra recién parida jadea mucho?” y, por ello, hemos preparado este artículo a través de especialistas.
¿qué Temperatura Debe Tener Una Perra Mientras Pare?
Si la perra de súbito deja de cuidar de los cachorros, esto es indudablemente una señal de que hay algo que no va bien. Como comentamos previamente debemos supervisar sus secreciones y su temperatura. Además debemos comprobar sus mamas diariamente para ver si están duras, dolorosas o calientes.
Por otro lado, una secreción vaginal con sangre es habitual a lo largo de 3 a 7 días después del nacimiento. Si continúa por más de una semana, cambia de color o lleva a cabo un fragancia, hay que comprobar para detectar la presencia de infección u otras complicaciones. Si la perra fue esterilizada en el momento de la cesárea, debería tener poca o ninguna secreción vaginal. Consigue el número de teléfono de emergencias de tu veterinario antes del nacimiento de los cachorros, ya que el parto se produce frecuentemente a lo largo de la noche.
La temperatura corporal de un perro se ubica entre los de 37,5 a 38,5 grados. De 12 a 24 horas antes del comienzo del parto, la temperatura de una perra puede bajar a 37,1 grados e inclusive a 36,4 grados en etnias pequeñas. La eclampsia o hipocalcemia puede ocurrir a lo largo de la gestación o hasta tres semanas después del parto. Hay que a una carencia de calcio en la nutrición y es mucho más frecuente en perras de etnias toy o miniatura. Durante las primeras horas la madre no querrá dejar a los recién nacidos y posiblemente debamos animarla a salir a fin de que lleve a cabo sus necesidades. Debemos ofrecerle agua y pequeñas cantidades de alimento, pero jamás obligarla a comer si ella no desea llevarlo a cabo.